Consciencia y gestión emocional

Desarrollar la consciencia para favorecer el proceso de autoconocimiento.

*Centro Intelectual


Mente- Creencias- ideas Irreales

*Centro Emocional

Conciencia y canalización de emociones. “El darse Cuenta”

*Centro instintivo-motor

Impulsos. Terapia corporal y energética.


Gestión emocional

-Consciencia de tus emociones

-Objetivos y planes

-Control de impulsos

-Sensibilidad a los sentimientos de otros. Escucha

-Aptitudes sociales

Técnicas de interiorización y desarrollo de la atención y consciencia corporal. Control emocional.

- Respiratorias
- Relajación-Meditación.
- Bioenergética.
- Reeducación postural
- Masaje
- Expresión y baile

- Entrenamiento asertivo
- Detención del pensamiento
-Creencias e ideas irreales.
- Pensamiento e imaginación.

Consciencia corporal

< Objetivos

-Consciencia para ayudarnos a mantener el equilibrio emocional y fomentar el bienestar en nuestras vidas.

-Higiene mental y emocional para los contratiempos diarios relacionados con la insuficiente gestión de sentimientos y emociones, inseguridad, divagaciones mentales problemas que afectan al funcionamiento correcto del organismo y que pueden derivar en afecciones del sistema emocional o del propio cuerpo.

-Concentrar la atención, favorecer la voluntad y controlar los sentimientos y emociones.

-Centrarnos en el momento presente. Intentar vivir el pasado solo aporta tristeza y centrarse exclusivamente en el futuro solo trae preocupación.

-Conocer los mecanismos psíquicos que aportan la felicidad o la infelicidad.


En primer lugar, ejercitar,

La Relajación.
Relajar los músculos de la cara y del cuerpo, centrar la atención en nuestra respiración y en las sensaciones conscientes de lo que miramos, tocamos… sentimos, como ayuda para percibir la realidad de una manera ajustada. Caminar conscientemente adquiriendo seguridad en nuestro cuerpo y que se transmita a nuestra psique.

Ser consciente de lo que perciben los sentidos y disfrutar de ello de la relajación y la belleza, del placer estético, redescubrir la belleza, las flores, la naturaleza….

Ser consciente de lo que pensamos y lo que emitimos.
Ser consciente de lo que se hace, leer, estudiar, trabajar……concentrarse. Incluso cuando no hay silencio.

Si fijamos nuestra atención en percibir sensaciones, la mente no tendrá sitio para preocupaciones, temores o divagaciones. Este proceso proporciona paz y sosiego.

Encontrar la cantidad adecuada de tiempo de receptividad y tiempo de descanso.

Aprender a pasar de la concentración a la sensación de forma rápida.

Búsqueda de objetivos, abandono de divagaciones ineficaces.
Poner orden en la vida. Trabajar la indecisión, inconstancia y voluntad.

Cada uno decide lo que quiere hacer y con la voluntad lo lleva a cabo
La voluntad es una capacidad innata del ser humano.

La voluntad requiere realización, acción: Reflexión, voluntad, acción.

-Reflexión: dudas, pros, contras. Siendo consciente de las propias limitaciones y esfuerzos inútiles.
-Voluntad: Objetivo concreto. Concentración en el mismo. Se debe visualizar el objetivo a alcanzar, y cuanto más claro sea, más fuerza tendrá.

-Acto. Sin dejarse llevar por la indecisión. Si la realización del acto es costosa se ha de pensar lo más posible en las consecuencias buenas.

Para hacer de la voluntad una aliada, se ha de reflexionar serenamente sobre el objetivo que se pretende.


SENTIMIENTOS Y EMOCIONES

Todos tenemos recuerdos, experiencias y emociones que se graban en nuestro interior. Si la carga emocional es positiva no tendremos problemas para avanzar pero si es negativa repercute en nuestra salud física y emocional.

Cualquier acontecimiento puede ser causa de emociones. Si es negativo, la emoción, también lo será , ahora bien, es el cerebro quien traduce una situación en emoción o sentimiento, por tanto habrá que ser consciente de nuestros pensamientos para dominar la reacción que nos hace daño.
Si el cerebro percibe un peligro, se desencadena el temor, las ganas de huir. Si es un obstáculo, surge la rabia, frustración…

Cuando se produce un acontecimiento desestabilizador la emoción se instala en el cuerpo y tiende a quedarse fijada en nuestra mente, en función de la importancia que le demos y el temor que nos infunda.

La reflexión serena será muy importante y nos permitirá darnos cuenta de que llevados por las emociones muchas veces, tendemos a exagerar y sacar las cosas de su sitio. Una pizca de humor es una actitud sana para desdramatizar y dominar nuestras emociones negativas.
De todas formas las emociones negativas pueden ser de distinta naturaleza, derrotistas, agresivas, culpabilizadoras,…por lo que la mente y la voluntad deberán trabajarlas de distinta manera.

Como técnica general debemos primero procurar no provocar situaciones que generan pensamientos y emociones negativas, pero si ya lo hemos hecho debemos suscitar en la mente otras sensaciones consciente que nos produzcan bienestar y considerar el dolor, ofensa, estimulo negativo como una enseñanza positiva.
Otro paso a considerar es identificar y modificar la idea perturbadora reflexionando sobre su posible causa.
Hay veces que el sentimiento negativo se instala y permanece un sentimiento de preocupación, tristeza…que ha echado raíces en nosotros. Podemos trabajar el sentimiento aceptando ese sentimiento y observando si es irreal al tiempo que podemos trabajar el sentimiento positivo que nos ayude a minimizar el opuesto. Si el sentimiento es de odio, llenaremos nuestra mente de amor hacia algo o alguien, si es de tristeza buscaremos situaciones alegres……si es de temor, pensaremos en situaciones que nos hagan sentirnos seguros….

Con el adecuado control mental nos acercaremos al dominio de la voluntad, fundamental par saber lo que se quiere y luchar por ello.

Dominio de las emociones para no dejarse arrastrar por la ira, tristeza, temor.

Valorar cuales son los síntomas, causas y las soluciones para la falta de control emocional y mental que nos impide ser feliz.


SENTIMIENTOS

Los sentimientos son la expresión de la relación con los demás, con el entorno.

Hay veces que uno se siente mal, pero no puede determinar la naturaleza y el origen de ese trastorno emocional. Es importante aprender a conocer los propios pensamientos para mejorar la calidad de vida, y mejorar la relación con uno mismo y los demás.

La mente debe estar en el presente. Si una persona arrastra un conflicto del pasado no resuelto y le condiciona su presente debe intentar resolver ese conflicto pasado, pues solo al liberare de el podrá centrar su atención en el presente permitiéndose avanzar.

Una vez se ha aprendido a entender los sentimientos propios, a darles salida, la persona se da una oportunidad para ser feliz, para mantener un dominio sobre si misma y vivir con optimismo. Liberarse de la carga emocional del pasado es fundamental. No se puede vivir anclado en los errores cometidos en el pasado.

Ansiedad

La ansiedad, es en esencia, el miedo al dolor a la pérdida. Surge cuando el individuo percibe una amenaza. Es de naturaleza instintiva. Cuando una persona está ansiosa, se siente insegura, inestable, tiene la sensación de que va a ocurrir algo malo….de que las circunstancias se le escapan a su control. Las principales causas de la ansiedad son la pérdida de control, la pérdida de un ser querido y la pérdida de autoestima.
Si viene del pasado hay que permitirse reconstruir el suceso y expresar el enojo, el dolor que probablemente se reprimió, lo que ayuda a asumir la pérdida.
La ansiedad crónica es difícil de soportar y a veces se requiere ayuda de un especialista.
Se deberán evitar las situaciones que resulten amenazantes para poder dominar el temor y cambiar lo que no nos gusta. Si la ansiedad surge de la dependencia, uno buscará aprender a ser más autónomo, mas independiente.. Si es desde el temor a perder el control, buscará modificar la actitud de control hacia los demás…

Cada individuo tiene el poder de diseñar su futuro y en esa búsqueda positiva la ansiedad se va diluyendo.
Cada uno es responsable de si mismo, y tiene la libertad de elegir el sufrimiento y/o la alegría.

Nadie más es responsable ¿Por qué me tengo que enfadar con alguien?

La rabia

La rabia es un sentimiento desbordante que se siente como irritación, enojo, fastidio,…que surge cuando uno se siente herido, decepcionado.

El problema de la rabia es cuando es tan desorbitada que consume toda la energía y ciega a la persona en todo lo demás.
La forma mas natural es focalizar la negatividad en aquello que provoca la rabia, pero a veces no es fácil identificar la causa.
Hay que dar salida a la rabia para que no se instale pero hay que elegir el blanco adecuado, pues si se da salida en alguien que no tiene la culpa, se está haciendo sufrir a alguien y uno se hará daño a si mismo, pues el sentimiento de culpa producido por el ataque generará mas dolor.
Cualquiera puede enfadarse pero no es fácil enfadarse con la persona adecuada, en el momento y lugar adecuados y en un grado y forma adecuada.

Cada persona necesita una expresión distinta de la rabia. Para unos verbalizar su enojo pueda ser suficiente, otros necesiten gritar con fuerza en un sitio solitario, correr hasta agotarse……En todo caso merece la pena afrontarla.

Sin embargo existen personas que se muestran siempre enojadas, que sienten que sus problemas siempre dependen de los demás, que son víctimas inocentes.
No asumen la culpa de su fracaso porque asumirlo genera dolor.
Es más fácil dirigirlo hacia otros.

Sin embargo esta situación genera una acumulación progresiva de rabia, frustración y dolor, que provoca más amargura e infelicidad.
La venganza como expresión de la ira es absolutamente malsana, no resuelve el problema y arrastra graves consecuencias.

Si alguien nos enoja no vale la pena que perdamos tiempo. No podemos ser tan vulnerables a alguien que trata de ofendernos. Si accedemos a sentir su ofensa, habremos convertido su problema en nuestro dejándonos ser manipulados en nuestros sentimientos y estado de ánimo. Alegrémonos de estar contentos y mostremos indiferencia y una sonrisa que desconcierten al a ofensor y que sea gratificante para nosotros.

La culpa

La culpa nos hace sentirnos crueles y malos generando un remordimiento y odio hacia nosotros difícil de mitigar. La culpa nos hace mostrar pesimismo y negatividad y buscar el castigo para aliviar su remordimiento. Algunas veces surge de la rabia contenida hacia el ofensor.
El sentimiento de culpa mas habitual surge de saber que hemos hecho daño a otros. Sentir rabia hacia un ser querido a menudo provoca culpa.
El problema es cuando la culpa no proviene de un hecho aislado sino de muchos. Se crea un círculo vicioso de culpa, venganza, castigo…
.Existe también el caso de conducta habitual a mostrarse herido y hacer que el otro se sienta culpable. Es la manifestación del chantaje emocional, maltrato psicológico, la manipulación de la autoestima de los demás.

En muchas ocasiones es difícil resolver la culpa propia o la de los demás, porque no se está por la labor de solucionar el conflicto. Cada uno debe valorar si vale la pena prolongar una discusión que no lleva a ninguna parte. Dos no riñen si uno no quiere.

De todas formas es bueno manifestar el dolor de una manera adecuada para que no se enquiste en el interior. No se debe cargar con los problemas emocionales ajenos a consta de un nuestro propio equilibrio emocional.

Las emociones influyen en nuestra salud y nuestro sistema inmunitario y por la tanto pueden influir en la aparición de determinados trastornos y enfermedades.

Forman parte de nuestra vida. Son la vida, y son tan necesarias las emociones positivas como negativas porque nos indican que camino debemos seguir para orientarnos hacia la felicidad.


No se trata de eludir las emociones negativas sino de resolverlas y evitar que se hagan crónicas y presidan nuestra vida. Habrá que aprender a canalizarlas de forma sana, ayudándonos de todo aquello que nos proporcione serenidad y autocontrol: Ejercicio físico aficiones, estudios, yoga, meditación, música, baile…… contacto con la naturaleza.

Cuando una enfermedad se pone de manifiesto a causa de un desequilibrio emocional, nuestro organismo está exigiendo un cambio en nuestra vida. Hay que permanecer atentos a las señales de nuestro cuerpo que nos indican que algo no va bien. Que existe un desajuste en nuestro organismo.


Inteligencia emocional


Se ha considerado que la inteligencia existe al margen de las emociones, y que en mayor o menor grado condiciona el éxito en la vida.
Sin embargo la experiencia demuestra que existen personas con elevada inteligencia que no son capaces de encontrar su felicidad mientras que otras con un coeficiente intelectual mediocre son absolutamente felices.

La clave se encuentra en lo que llamamos inteligencia emocional, un conjunto de habilidades entre las que destacan el autocontrol, el entusiasmo, la perseverancia, la capacidad de automotivarse y relacionarse.

Por ese motivo desarrollar habilidades que configuran la inteligencia emocional se está convirtiendo en el objetivo de muchas personas en búsqueda de encontrar su camino hacia el bienestar.

Es evidente, en la sociedad actual, un descontrol sobre las propias emociones que está generando un desajuste entre los hechos y las reacciones que se producen. Un pequeño acto puede generar una oleada de violencia. En las últimas décadas se ha producido un grave desprestigio de la voluntad y del autocontrol. Como siempre suele suceder la verdad está en el punto medio. El control cerebral es necesario y la espontaneidad también. De aquí la necesidad de dotar de inteligencia a la emoción.

Cuando se toma conciencia de los sentimientos y se aprende a entenderlos y dominarlos, se consigue un efecto positivo en todos los sentidos, y se elimina el sentido de culpa, de arrepentimiento, los actos violentos, la ansiedad y muchas posibilidades de que aparezca un trastorno depresivo.

Las acciones y decisiones dependen tanto de los pensamientos como de los sentimientos. Cada persona tiene dos mentes: una que piensa y otra que siente que se interrelacionan.

Normalmente las personas suelen ser conscientes de su mente racional. La mente emocional es más intuitiva, impulsiva, ilógica. A menudo la mente racional se ve bloqueada por las emociones. Y en circunstancias uno se da cuenta de que esas dos mentes tienen objetivos contrapuestos. “El corazón tiene razones que la razón no entiende” y surge el problema cuando no podemos armonizar los dos mundos.
Normalmente la mente emocional y la racional trabajan en colaboración, en equilibrio, ayudándose la una a otra. Pero cuando el equilibrio se rompe la mente emocional desborda a la racional, la bloquea. Y por la misma razón la mente racional ciega las emociones reprimiendo los sentimientos creando desequilibrio e insatisfacción.

Lo que es insano es reprimir una de las dos mentes. El individuo debe procurar armonizar la inteligencia racional y la emocional. La cabeza y el corazón.
Cuando la mente bloque el corazón es porque los pensamientos no son correctos.


Habilidades emocionales


Los elementos que se valoran en la inteligencia emocional son:

Autoconocimiento, capacidad de automatización y no dejarse hundir por las frustraciones, control reimpulsos, regular el propio estado de ánimo, evitar la angustia y ansiedad, tener capacidad de empatía y confianza en los demás.

La primera escuela de aprendizaje emocional es la familia. En la familia el niño aprende a manifestar sus emociones. La forma en que los padres tratan a sus hijos y se relacionan entre ellos tiene consecuencias directas en el aprendizaje emocional de los hijos.

El primer aprendizaje consiste identificar las emociones y ser capaz de expresar como uno se siente, averiguar porque se siente así y como resolver el conflicto.

Todos partimos de un bagaje emocional genético innato, que constituye el temperamento, la predisposición a determinados estados de ánimo. Sin embargo las experiencias de la vida pueden alterar ese temperamento innato. Además cada uno puede modificar aquello de si mismo que le impide ser feliz.
Existen ámbitos para lograr un alto nivel de inteligencia emocional. Cada uno debe valorar donde están sus carencias, porque con un poco de esfuerzo se puede aprender hábitos para dominarlas y suplir lo que no se aprendió en la infancia.

Conocimiento de las propias emociones.

Reconocer un sentimiento preciso cuando aparece.

Conocimiento de uno mismo es conocer como funcionan las emociones e identificarlas en el momento. Tomar consciencia del sentimiento es el primer paso para el autocontrol. Ser consciente del estado de ánimo de cada momento. Observar los sentimientos y sensaciones como un espectador, sin juzgar.
Poner nombre a nuestras emociones tanto positivas como negativas.
Existen dos niveles de emoción. Uno consciente y otro inconsciente. La mayoría de las emociones surgen a nivel inconsciente y condicionan la forma de reaccionar.
La clave está en aprender a ser consciente de esas turbulencias emocionales para valorarlas de otro modo, incidir sobre ellas y deshacerse de los estados de ánimo negativos. Aquí está la clave del autoconocimiento.

Capacidad para controlar las emociones.

Conocerte e identificar los sentimientos permite tenerlos bajo control.
El dominio de las propias emociones ha sido siempre un hecho muy valorado, sin embargo domino no significa represión, sino equilibrio.
Dominio es sentir una emoción acorde con un hecho, adecuada y proporcionada. Reprimir significa apatía y posterior ansiedad. Dejar las emociones desbocadas altera también el equilibrio y bienestar.


Dominio sobre todo de las emociones negativas, aunque no supone ser feliz las 24 horas del día, sino que esas emociones no sean exageradamente intensas ni demasiado duraderas. Siempre habrá acontecimientos que provoquen tristeza, enojo…..y son experiencias que producen enseñanzas sobre uno mismo y contribuyen al equilibrio emocional. Buscar el equilibrio en los vaivenes de la vida es uno de los objetivos de la inteligencia emocional. Y una de sus habilidades es aprender a calmarse.

Tres emociones muy comunes.
 Enfado
Difícil de controlar ya que cuando una se enfada comienza un dialogo interno que contribuye a aumentar el enfado. Por tanto conviene quedarse en el punto de origen del enfado, sin alimentar la espiral de reproches…. Una actividad que puede ayudar es descargar adrenalina por medio del deporte. Una vez que el enfado se ha enfriado se puede intentar solucionar pero nunca alimentarlo.                             
Preocupación
En muchas ocasiones nos obsesionamos pero no buscamos salidas constructivas a lo que nos preocupa generando ansiedad. El primer paso es centrar el punto de atención en otra cosa afrontando después el problema de una manera mas positiva después de la reflexión.
Tristeza
Nadie quiere estar triste pero la tristeza en algunos aspectos puede ser muy positiva. Ayuda a asumir una pérdida, y a reajustar las emociones, renovando energías para un nuevo ciclo de la vida. Hay veces que sin motivos aparentes sentimos tristeza que quizá sea el organismo quien la crea para que el cuerpo y lamente descansen.
Ahora bien, si la tristeza se vuelve crónica dejándose arrastrar por un estado de ánimo depresivo debemos intentar por todos los medios mitigar esa tristeza, con actividad, distracción que nos ayuden a superar el caer en esa tristeza.

Capacidad de automotivación

Para no flaquear en las metas, con voluntad, perseverar y motivarse sometiendo la maquinaria emocional a la consecución de los objetivos marcados.

Los estados de ánimo positivos y equilibrados ayudan a encontrar soluciones a los problemas, motivan ante los fracasos para seguir adelante y ayudan a reflexionar correctamente. Saber esperar y ser constante será garantía de éxito, capacidad de dominar los impulsos y demorarlos para conseguir un objetivo, es una habilidad que permite culminar muchas actividades que requieren disciplina.
El optimismo es una herramienta importante porque permite seguir adelante y saber que todo irá bien. Impide caer en la depresión, abulia, apatía y victicismo. El optimismo y la esperanza son habilidades de la inteligencia emocional.

Reconocimiento de las emociones ajenas


Quien posee una conciencia ajustada de sí mismo y de sus emociones está preparado para comprender las de los demás.
Para detectar y entender los sentimientos de los demás se debe percibir la información que transmite la comunicación no verbal. Se quiere ser muy receptivo y estar atento al otro. La falta de empatía es una carencia de l inteligencia emocional pues toda relación personal de afecto se basa en la capacidad para conectar con las emociones del otro.

Control de las relaciones

Como consecuencia de lo anterior una persona es capaz de relacionarse de forma adecuada con los demás y con las emociones de los demás. Ser capaz de expresar sentimientos, saber en que medida se puede hacer y si es pertinente o no.

Consejos prácticos (Acciones que nos llevan al bienestar.)

-Conocerse a uno mismo, como esencia del autocontrol.

-Pensar en los demás. Relativizar las preocupaciones, obsesiones, y pensamientos se consigue centrando la atención más allá de uno mismo. Fomentando la relaciones los otros pensando en sus problemas, consejos, se ven nuestros problemas menos importantes y mas fáciles de solucionar.

-Orden mental Tener un orden en el quehacer cotidiano, ayuda a llevar varios asuntos y preocupaciones que nos provoque desajuste y agobio. Tener un proyecto de vida, saber lo que se quiere y ejercitar la voluntad para llevarlo a cabo.

-Confiar: Ver un final en los malos momentos y confiar en uno mismo y en una solución, sabiendo que los males imaginados son siempre mayores en lamente que en la realidad.

-Superar el temor: En el fondo la mayoría de los sentimientos negativos esconden miedos. Miedos a vivir y enfrentar la vida .El temor es difícil de controlar porque a menudo no sabemos de donde proviene. El miedo paraliza y en primer lugar debemos actuar para evitarlo y luego podremos reflexionar y valorar la situación.

-Vencer la tristeza: La tristeza está muy ligada al fracaso, la frustración y la pérdida por lo que determinadas causa psíquicas predisponen a padecerla.
El perfeccionismo, el pesimismo, victicismo, miedo a sufrir, miedo al fracaso…. Es necesario para vencer la tristeza hacer un esfuerzo por modificar percepciones y hábitos. Las cosas no son ni buenas ni malas, sino dependen del punto vista, de cómo se vean e interpreten.

-Practicar hábitos sanos: Higiene mental y emocional. Hábitos de vida saludables: alimentación, descanso, hacer ejercicio, saber relajarse, tener aficiones, y desarrollar el sentido del humor.


APRENDER A SER FELIZ

Ser consciente de nuestras limitaciones y aprender a ser feliz con lo que se tiene. En realidad la felicidad depende del buen uso que hace de lo que se tiene y de la manera de encarar los acontecimientos. Ser capaz de dominar nuestros sentimientos, y conducir la propia vida de manera que la felicidad sea la compañera día a día. La grandeza de la voluntad consiste en poder elegir lo que uno quiere y actuar para conseguirlo.

Si se produce un conflicto interno es muy importante verbalizar lo que uno siente. Las dudas, temores, miedos, pueden ser atacados y solucionados más fácilmente.

Centrarse en el presente. Es la vida presente y de forma conciente lo que hace que podamos vivir con plenitud y cualquier acto cotidiano puede ser motivo de satisfacción, despareciendo la tristeza pasada por lo perdido y el miedo por el futuro, buscando ocupaciones gratificantes a la mente.

Transmitir sensaciones positivas a los demás ayuda también al autocontrol. Si uno se deja llevar por sus tormentos transmite negatividad y la tendencia natural es alejarse de aquel que agobia y está triste porque es altamente contagioso. El buen humor es un estado magnético, que da equilibrio y serenidad.

Ajustar las metas de la felicidad a la propia realidad, recursos y capacidades y utilizar nuestro tiempo como un patrimonio valioso que debe utilizarse para conseguir la felicidad. Cada minuto que pasa es una oportunidad para trabajar por uno mismo. Aprovecharlo o no, es una decisión personal.